Hoy día 12 de septiembre, estoy más animada que de costumbre ya que he sufrido algunos ataques de ansiedad bastante fuertes. Esto me ha llevado a leer de nuevo 'El poder' de Rhonda Byrne, en este libro que por supuesto recomiendo leer hace hincapié en la felicidad, en encontrarla en amar las cosas que haces y no hacer cosas para amar.
Creo que es la primera vez que escribo sobre mi vida y no sobre alguien pero, ¿quién más importante que yo misma? y es porque necesitaba escribir sobre lo que me pasa últimamente, bien, partiendo de la base que cada uno es su peor enemigo diré que yo lo he llevado al extremo, sufrí dos ataques de ansiedad hace una semana tan fuertes que tuve que ir a urgencias para volver a tranquilizarme, estoy intentando buscar una salida a esto no sé a que tengo miedo exactamente lo único que sé es que desde que no pienso las cosas todo me va mejor, llevo dos semanas sin salir de casa intentando tranquilizarme, intentando que esto no vuelva a ocurrir, decepcionando a amigas y dándoles el día a muchas otras personas, pero eso era, tener miedo solo a ti misma.
Hace unos días vi un artículo que se llamaba 'palabras que curan'en una revista de Mujerhoy ponía de ejemplo a una mujer que aun estando casada y teniéndolo todo sufría depresión quería tener un hijo pero no quería quedarse embarazada esto le pasaba por miedo porque cuando esta era pequeña su madre tuvo cáncer y no pudo estar con ella y ayudarla como lo haría una madre, cuando se paró a pensar en su madre se dio cuenta que tenia 33 años actualmente, la misma edad que tenía su madre cuando la tuvo al hablar con su terapeuta le dijo que ése era su miedo, hacer las cosas mal, no saber estar ahí y hacer sufrir a su hijo lo que ella sufrió cuando niña. Al leerlo entendí porqué me costaba tanto salir de los problemas en los que mentalmente y creyendo que inconscientemente estaba metida, esto, era algo similar a lo que yo bajo ningún concepto quería convertirme o caer, la depresión, tengo la misma edad que tenía un familiar cuando le diagnosticaron este problema, al estar a su lado día tras día, veía la fuerza de los pensamientos para hacer que no saliera de casa, que estuviera tumbado durmiendo siempre, con esa cara sin gesticular, incluso me di cuenta que había acabado utilizando las palabras que el decía cuando le preguntábamos ¿por qué no sales?
Quizás el miedo atraiga a lo que tememos, es pues cuando debes concienciarte que no hay que tener miedo para no atraer nada, dejarás de tener miedo, cuando pongas palabras a lo que te asusta, esta mujer tuvo esperanza, esto es algo bueno, quizás lo mejor de todo y las cosas buenas no mueren.
Quizás el miedo atraiga a lo que tememos, es pues cuando debes concienciarte que no hay que tener miedo para no atraer nada, dejarás de tener miedo, cuando pongas palabras a lo que te asusta, esta mujer tuvo esperanza, esto es algo bueno, quizás lo mejor de todo y las cosas buenas no mueren.
